lunes, 12 de diciembre de 2011

LUXACION CONGENITA DE CADERA

Luxación congénita de cadera

DR. EYZAGUIRRE OJEDA CARLOS DARIO

exploración normal y posteriormente presentar
una luxación es lo que justifica la denominación
actual de “Displasia evolutiva o
del desarrollo de la cadera”.
Hay que tener en cuenta que cuanto más
precoz sea el diagnóstico, mejor será la evolución.

DIAGNÓSTICO CLÍNICO

Suele tratarse de un recién nacido hembra
(80%) nacido en presentación de nalgas. La
afectación puede ser uni o bilateral. En esta
edad y durante el primer mes, es importante
la maniobra de Barlow (figura 1). Pretende
notar el resalte producido en la cadera luxable
con la entrada y salida de la cabeza femoral
de la cavidad cotiloidea. Colocado el
niño en decúbito supino, se doblan las rodi-
La luxación congénita de cadera es una alteración
en la relación entre el cótilo y la cabeza
femoral. En este concepto se incluyen dos
tipos clínicos que se diferencian por el momento
de actuación de la noxa patógena.
La cadera luxable o luxación de tipo fetal está
causada por una detención parcial del crecimiento
intrauterino en la región de la cadera,
constituyendo el 85% de los casos. Si la
alteración se produce antes del tercer mes
de vida intrauterina, la cadera aparece ya luxada
en el momento del nacimiento, motivando
la cadera laxada o luxación de tipo
embrionario o teratológica.
Por las posibilidades evolutivas, se considera
muy importante la exploración sistemática
de las caderas en el recién nacido, la cual
se debe repetir cuidadosamente hasta los 6
meses. Esta posibilidad de un neonato con/
Ortolani que no mejora la situación de la cadera,
nos tiene que hacer sospechar la presencia
de una luxación de cadera irreductible.
En estos casos es útil el estudio radiológico
que mostrará el fémur ascendido




ETIOLÓGICO

No parece existir una causa única de luxación
congénita de cadera. La etiología es
multifactorial, combinándose factores tanto
mecánicos como fisiológicos por parte de la
madre y el niño, y en ocasiones factores ambientales
que producirán la inestabilidad de
la cadera y la subsiguiente luxación. Es muy
manifiesto el carácter familiar, posiblemente
por irregular desarrollo del techo cotiloideo,
dato de gran valor al efectuar la historia
clínica del recién nacido.

EXÁMENES COMPLEMENTARIOS

En el recién nacido, la ecografía de la cadera
es un procedimiento diagnóstico importante
dentro de la articulación coxofemoral, ya
que los ultrasonidos proporcionan imágenes
detalladas de la cadera ósea y cartilaginosa
del neonato. Permite realizar una exploración
estática y dinámica de la articulación, es
la exploración indicada en el período neonatal.
Se hará cuando presente algún signo de sospecha,
no siendo indicada su petición sistemática.
En esta edad, la radiografía de cadera es poco
útil, ya que no ha aparecido el núcleo de la
cabeza femoral, el cual aparece entre el 2º y
5º mes de vida. No obstante, una radiografía
practicada tras provocar la luxación, con
las caderas en una posición anteroposterior
perfecta y sin ninguna rotación, da unos signos
típicos (figura 2): oblicuidad anormal
llas en ángulo recto y se abarca el fémur con
la mano, de modo que el pulgar se sitúe en la
cara interna del muslo y los pulpejos de los
otros cuatro dedos toquen el trocánter mayor.
Haciendo entonces palanca sobre el
trocánter, se separan las rodillas, llevándolas
hacia el plano de la cama; esta maniobra
hace entrar la cabeza en el cótilo y se nota el
resalte que la reducción produce. Al efectuar
la maniobra a la inversa y reproducir la
luxación, se nota el resalte de salida. La maniobra
de Ortolani consiste con ambas caderas
en flexión y abducción de 90º, si la cadera
está luxada, la abducción está limitada
y es la presión de los dedos sobre el trocanter,
forzando suavemente la abducción, la
que reducirá la cadera que al soltar la po
ción vuelve a luxarse.
En la cadera luxada tiene más valor el acortamiento
del miembro, la asimetría de los
pliegues cutáneos posteriores y la limitación
de la abducción. Tanto es así que ante una
asimetría de pliegues glúteos debe solicitarse
una ecografía de caderas.
Con estas dos maniobras podemos clasificar
los diferentes tipos de cadera patológica: a)
cadera inestable cuando el Barlow es positivo;
b) cadera luxada reducible cuando el
Ortolani es positivo y c) cadena luxada irreductible
cuando con el Ortolani no se logra
la reducción. Debe insistirse que estas maniobras
solo tienen valor durante los primeros
días de vida.
Una cadera luxable es siempre patológica,
ya que en el recién nacido normal la cadera
tiene tal estabilidad que un movimiento forzado
motiva antes un desprendimiento epifisario.
La presencia de una importante limitación de
la abducción, junto con una maniobra de
ciones, a veces tumefacción y en la radiografía
y ecografía signos propios de artritis.

TRATAMIENTO

Los objetivos que se persiguen en el tratamiento
de la luxación congénita de cadera
son:
1. Que consigamos la reducción articular
de preferencia concéntrica.
2. Mantener la máxima estabilidad de la
cadera.
3. Resolver la frecuente displasia residual.
En la luxación irreductible, el tratamiento
dura hasta los 6 meses aproximadamente.
Primero se utiliza el arnés de Paulik, y en caso
de no conseguir la reducción a las 2-3 semanas,
efectuaremos tracción continúa con abducción
progresiva, reducción bajo anestesia
general y yeso. Esta última pauta es la que se
hace de entrada, cuando el diagnóstico se
efectúa después de los 6 meses de edad.
En las luxaciones reductibles, está indicado
inicialmente el arnés de Paulik. Si a las 3 semanas
continúa la cadera inestable, se coloca
un yeso en flexión de 100º y abducción
del techo cotiloideo, que motiva en la cadera
luxable un ángulo acetabular superior a
33°, ascenso del fémur, que puede visualizarse
por la rotura de la línea de Shenton, y disminución
de la distancia que separa al cuello
femoral de la línea de los cartílagos en Y,
así como separación del fémur (referencias de
Hilgenreiner).
En la radiografía obtenida en la posición
de Von Rossen (ambos fémures en separación
y rotación interna de 45°), el eje femoral
se sitúa encima del cótilo. La artrografía
sólo estará indicada en caderas luxadas con
dificultad para su reducción, lo cual se presenta
en edades posteriores.

DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL

No se confundirá con pequeños crujidos, sin
valor, que se aprecian al efectuar la maniobra
de Ortolani. Existen luxaciones de cadera secundarias
debidas sobre todo a osteoartritis.
El diagnóstico diferencial más importante
deberá efectuarse con la artritis de cadera en
la que aparte de síndrome general infeccioso,
existe mayor dolor ante pequeñas moviliza-
de 60º durante un mes, para continuar después
con el arnés hasta conseguir la completa
estabilidad y esté resuelta la displasia del
acetábulo.
En las caderas luxables o inestables, debido
a que la mayoría tienen buen pronóstico, se
utiliza la técnica del triple pañal, cuyo objetivo
es mantener la flexión y abducción de
caderas, es decir, la llamada postura de reducción,
que debe abarcar hasta las rodillas.
Una posible complicación del tratamiento
es la osteocondritis.
La cirugía de la displasia acetabular se utiliza
exclusivamente para completar una reducción
quirúrgica o corregir secuelas. Suele
efectuarse una osteotomía pélvica con
objeto de aumentar el tamaño de la cavidad
acetabular o modificar su orientación para
obtener una mejor capacidad funcional.

1 comentario:

  1. El Doctor Patron ofrece un excelente tratamiento para la Luxación de cadera en niños como parte de la ortopedia Pediátrica, contáctenos para más información

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